"Eso sí gana partidos": Ferrero explica por qué jugar la final en París solo depende de Alcaraz

Carlos Alcaraz está viviendo un impresionante Roland Garros. El español está jugando el mejor tenis de su vida, en un torneo donde está confirmando que, cuando su juego fluye, es muy difícil encontrar un rival que le frene. Y, por si fuera poco, el número dos del mundo ha mejorado claramente en uno de los aspectos que más se le criticaba en los últimos meses: su mentalidad. Ahora, solo Lorenzo Musetti se interpone en su camino para alcanzar la gran final del torneo.

No será un partido nada sencillo, pues el italiano tiene el honor de ser el quinto jugador de la historia capaz de alcanzar, al menos, las semifinales de todos los torneos de tierra batida de una misma gira. Musetti está jugando muy buen tenis y, de hecho, esta misma temporada ya se ha enfrentado al español en dos ocasiones. Y, de momento, la moneda está cayendo del lado del murciano, con cinco victorias en seis partidos, todas ellas consecutivas desde 2023.

Pero hay un elemento que destaca especialmente en el español. A pesar de ser considerado como el gran favorito pues, no en vano, es el vigente ganador de Roland Garros, tiene los pies en la tierra y no quiere ni oír hablar de nada que no sea el siguiente encuentro. Ha mejorado enormemente su concentración, está sabiendo gestionar a las mil maravillas los malos momentos de los partidos y, sobre todo, tiene la confianza por las nubes para creer en su juego por encima de todo.

"Musetti no es asequible, para nada", espetaba Alcaraz tras aplastar a Paul. El mensaje era claro: nunca hay que menospreciar al rival, mucho menos a un top ten, que le pondrá el partido muy difícil. Pero la ventaja del número dos del mundo es que está muy convencido de lo que tiene que hacer en pista. Tiene la actitud, el juego, las ganas y la cabeza para seguir haciendo historia en Roland Garros. Es consciente de que tiene una enorme oportunidad delante y quiere cogerla con las dos manos.

De hecho, es algo que el propio Juan Carlos Ferrero, su entrenador, sabe, por lo que cree que el pase a la final del torneo solo depende de Alcaraz. ¿Cómo? Si es capaz de mantener su nivel, jugar como él sabe y utilizando todas las armas con las que cuenta, terminará encontrando la vía para desarmar a su rival. Así lo confirmaba en una entrevista con Álex Corretja en Eurosport, donde Ferrero considera que lograr una victoria más que le acerque al título es algo que está solo en la mano de su pupilo.

"Alcaraz está jugando muy bien, ha dado un salto de calidad por la forma en la que ganó a Tommy Paul. El partido ante Shelton nos dio una idea de lo que tiene y no tiene que hacer. Jugó con mucha tensión y la bola no le iba pero, pese a ello, ganó, lo que nos ayuda a que siga confiando mucho en él, incluso cuando no está jugando su mejor tenis. Si sigue teniendo intensidad, lucha, entrega... Eso también gana partidos", explicaba el que fuera número uno del tenis mundial.

El español siempre ha sido un tenista que, si disfruta en la pista, es muy difícil de parar. Pero en París tiene algo diferente en la mirada: se le ve menos tensionado, más alegre y con una sonrisa en la cara en la mayor parte de los encuentros, síntoma que confirma que se siente cómodo con lo que hace. Y eso se nota, pues está mostrando su mejor versión en mucho tiempo, precisamente cuando llega la hora de la verdad. Es el momento de dar un puñetazo definitivo sobre la mesa.

Para Ferrero, la clave está en que Alcaraz entienda que el partido está en sus manos y que meterse a la final solo depende de él. Si sigue jugando como hasta ahora, es el rival a batir: "La mayoría de los partidos dependen de él, porque tiene tantas armas que, cuando las utiliza de forma correcta, con valentía, con predisposición a dominar e irse hacia adelante, si está acertado, es muy difícil pararle". Ferrero le pide valentía y alegría en pista. Alcaraz está respondiendo con creces.

Será Musetti quien intente dar la sorpresa y derrotar al español, pero es consciente de que es una misión ciertamente compleja. De hecho, ambos se vieron las caras recientemente en las semifinales del Masters de Roma, donde Alcaraz terminó levantando el título. Tras el enfrentamiento entre ambos, el italiano tuvo unas bonitas palabras hacia él: "Carlos es un fenómeno al que le critican demasiado. El mejor Carlos sobre tierra batida, es el mejor de todos", confirmaba.

Solo unas semanas más tarde, ambos jugadores volverán a verse las caras en la arcilla, en este caso en todas unas semifinales de Grand Slam. El español no quiere tirar las campanas al vuelo, pero su equipo está convencido de que, si es capaz de mantener su juego, tendrá mucho avanzado de cara a la final: "Debe flagelarse menos, porque le hace estar demasiado emocional en la pista", confesaba Ferrero. Está en sus manos meterse en la gran final de París... una vez más.